Elementor #601

Cocina Asiática

Progreso, industrialización, globalización, no son solo palabras, Son fenómenos que nos han llevado a un cambio brusco y a veces radical de nuestro modo de vida: forma de trabajar, comunicarnos, movernos y como no, alimentarnos.
Los cambios en la alimentación nos han supuesto una modificación en nuestra dieta hacia productos con mayor densidad energética. Es decir, hemos aumentado el consumo de alimentos con más grasa y más azúcar añadido. Y comemos menos cereales integrales, legumbres, frutas y verduras.
Debido a estos cambios en los hábitos alimentarios y el modo de vida, las enfermedades crónicas – incluidas la obesidad, la diabetes mellitus, las enfermedades cardiovasculares, la hipertensión y los accidentes cerebrovasculares y algunos tipos de cáncer – han aumentado.
La mayoría somos consciente de ello, pero quizás no tengamos tan claro que los ajustes alimentarios no sólo influyen en la salud del momento sino que pueden influir en nuestra salud en etapas posteriores de la vida. Algo a tener en cuenta si pretendemos vivir mucho pero además en plenas facultades.
Nos guste o no “somos lo que comemos” y lo que comemos nos está enfermando. Desde AGERNATURA NUTRICIÓN te proporcionamos una serie de herramientas para que poco a poco, y disfrutando en el proceso, consigas poner en tu mesa alimentos que te alejen de la enfermedad o mejoren tu estado de salud.
Para ello hemos diseñado diversos bloques temáticos en los que puedes bucear en busca del que más se ajusta a tus necesidades.

Nos inspiramos en las cocinas tradicionales de diversas regiones del mundo conocidas por la buena salud de sus habitantes. Aportamos a nuestros platos estos alimentos, condimentos, especias…, para conseguir platos de aromas y sabores sorprendentes que además son saludables.

Esta cocina se orienta a diseñar y cocinar menús que ayuden a mejorar el estado de salud o prevenir la enfermedad. Profundizaremos en cada una de las enfermedades de este siglo relacionadas con la alimentación para ayudarte recuperar el equilibrio.

Es verdad que en estos tiempos es difícil conciliar la vida familiar y la laboral.
La falta de tiempo y el ritmo acelerado nos impide en muchas ocasiones preparar una determinada comida y disfrutarla a la mesa con la familia.